Cuanta más atención le prestas a algo, más probabilidad hay de que crezca. Tu atención es como el fuelle de una pequeña hoguera. Si le prestas atención a la salud y la cuidas, con límites y disciplina, mejorará y la llama prosperará.
Si le prestas atención a tus finanzas, con el tiempo, administrarás mejor y mejorarán. Si le prestas atención a relaciones buenas con pequeños detalles, mejorarán.
El problema de este siglo es que prestamos atención y le damos fuelle (entrando al trapo) a cosas que no valen la pena, a ese conductor que se nos atravesó en la carretera, a esa señora que se nos coló en la cola de la compra del supermercado y poco a poco, nos llenamos de un malestar innecesario. Todo eso, son distracciones y por eso, es tan importante, trabajar a qué le damos atención.
Esto es como cuando una mujer quiere quedarse embarazada… De pronto, empieza a ver a muchas embarazadas. Esto es porque su atención la tiene en ese deseo. Pon solo atención a lo positivo y observarás como tu vida da un giro importante…