¿A qué le das aire? Hace tiempo llevo observando que cada día, me enfrento al mismo reto: ante mí se presentan dos llamas, una azul llena de agradecimiento donde el foco está en lo bueno que tengo en mi vida, aparte de tener capacidades y soluciones y la llama negra, llena de problemas y de un caos externo que cambia de persona y de lugar intentando ensombrecer mi tiempo. El desafío está en que solo puedo darle aire a UNA de las dos. Creo que podrás imaginar a qué le doy vida y a cual no.
Que un día elijas darle aire a la llama negra, no es un problema, a priori, pero cuando un día tras otro decides darle aire a la oscuridad en vez de a la luz, la sombra acabará gobernándote consumiéndote de dolor. En cambio, si decides darle aire lo máximo que puedas a la llama azul, por más oscuridad que venga, tendrás la energía y el gas suficiente para surfear cualquier inconveniente. Es la llama azul la que da calor y sentido a tu vida.
Creo que no era consciente del poder que tiene el fuelle hasta que vi que ese patrón se me repetía una y otra vez cada día del año y como a largo plazo, saca lo mejor o lo peor de mí. El fuelle tiene la capacidad de dar vida y de dar muerte porque en el momento que eliges dar vida a la llama azul, significa que le estás quitando la posibilidad de existir a la negra.
Cuántas grandes cosas podemos hacer si nos responsabilizamos de hacer un buen uso de ese fuelle y qué vida más grandiosa podemos crear si lo trabajamos los 365 días del año.
¡Buen finde!